diciembre 19, 2003
Felices fiestas
Hoy empieza mi corto periodo de vacaciones laborales y como no tengo pc en casa, no habrá más comentarios hasta el 18 de enero.
Les deseo a todos los lectores que se pasan por esta bitácora unas felices fiestas y lo mejor para el año nuevo.
Gracias a todos los nuevos amigos que hice con este opinador, ellos han sido sin duda lo mejor de este año para mí: colegas brillantes y maravillosos de distintos lugares, con los que he aprendido cantidades, me he divertido mucho y con los que me he reconciliado definitivamente con mi profesión.
Un abrazo y mis mejores deseos sinceramente para todos, nos vemos en el 2004.
Les deseo a todos los lectores que se pasan por esta bitácora unas felices fiestas y lo mejor para el año nuevo.
Gracias a todos los nuevos amigos que hice con este opinador, ellos han sido sin duda lo mejor de este año para mí: colegas brillantes y maravillosos de distintos lugares, con los que he aprendido cantidades, me he divertido mucho y con los que me he reconciliado definitivamente con mi profesión.
Un abrazo y mis mejores deseos sinceramente para todos, nos vemos en el 2004.
diciembre 15, 2003
Cuando menos es más
Hace algunos años uno de los periódicos nacionales publicó una nota sobre la biblioteca Luis Ángel Arango de Bogotá. El artículo describía la Biblioteca, sus servicios y colecciones, pero me impresionó que resaltaran que era la Biblioteca que recibía más usuarios de entre las bibliotecas públicas más importantes del mundo y que en eso centraran su éxito y su valor.
Yo lo discutí en su momento y sigo poniéndolo como ejemplo del desconocimiento de la función de una biblioteca pública y de la debilidad tan común de equiparar más con mejor.
En ese momento la Luis Ángel no tenía préstamo a domicilio, aunque su colección es estupenda era cerrada.
Sin embargo era considerada la mejor biblioteca del país, porque era la que tenía más libros y recibía más usuarios al día.
El asunto volvió de nuevo porque recientemente un importante investigador en un evento académico mensionó el hecho como de tremenda relevancia. Yo por el contrario lo encuentro algo vergonzoso.
Explico porqué:
El artículo comparaba la Luis Ángel con la biblioteca pública de París y otras bibliotecas públicas de ciudades capitales del mundo e indicaba que recibía muchos más usuarios al día que cualquiera de las otras, como queriendo indicar con ello que la Luis Ángel era mejor y que los bogotanos eran más adeptos a la biblioteca que los méxicanos, los bonaerences, los españoles y los franceses.
Pero lo que había que preguntarse es porqué es cierto que recibe más usuarios al día que esas otras bibliotecas públicas y en la respuesta esta la vergüenza y la rabia que el dato me despierta, aún hoy:
Porque Bogotá es la única ciudad capital que teniendo seis millones de habitantes tenía sólo una biblioteca pública con una única sede y, en consecuencia, es normal que fuera la que recibiera más usuarios al día. Eso no es ninguna gracia es deplorable.
Afortunadamente eso ha cambiado en los últimos dos años con la creación de tres nuevas grandes bibliotecas públicas y la rehabilitación y dotación de las bibliotecas que existían solo de nombre.
El programa BiblioRed, Red Capital de Bibliotecas Públicas de Bogotá seguro ha logrado que el índice de ingreso de la Luis Ángel disminuya y eso significa un mejoramiento en los servicios bibliotecarios de la Capital.
Lamentablemente la Red ya se enfrenta a problemas financieros y la Alcaldía ha cedido su administración con un convenio a otas insituciones. Pero el logro de su creación se encuentra vivo y debe ahora la comunidad luchar por su permanencia.
Yo lo discutí en su momento y sigo poniéndolo como ejemplo del desconocimiento de la función de una biblioteca pública y de la debilidad tan común de equiparar más con mejor.
En ese momento la Luis Ángel no tenía préstamo a domicilio, aunque su colección es estupenda era cerrada.
Sin embargo era considerada la mejor biblioteca del país, porque era la que tenía más libros y recibía más usuarios al día.
El asunto volvió de nuevo porque recientemente un importante investigador en un evento académico mensionó el hecho como de tremenda relevancia. Yo por el contrario lo encuentro algo vergonzoso.
Explico porqué:
El artículo comparaba la Luis Ángel con la biblioteca pública de París y otras bibliotecas públicas de ciudades capitales del mundo e indicaba que recibía muchos más usuarios al día que cualquiera de las otras, como queriendo indicar con ello que la Luis Ángel era mejor y que los bogotanos eran más adeptos a la biblioteca que los méxicanos, los bonaerences, los españoles y los franceses.
Pero lo que había que preguntarse es porqué es cierto que recibe más usuarios al día que esas otras bibliotecas públicas y en la respuesta esta la vergüenza y la rabia que el dato me despierta, aún hoy:
Porque Bogotá es la única ciudad capital que teniendo seis millones de habitantes tenía sólo una biblioteca pública con una única sede y, en consecuencia, es normal que fuera la que recibiera más usuarios al día. Eso no es ninguna gracia es deplorable.
Afortunadamente eso ha cambiado en los últimos dos años con la creación de tres nuevas grandes bibliotecas públicas y la rehabilitación y dotación de las bibliotecas que existían solo de nombre.
El programa BiblioRed, Red Capital de Bibliotecas Públicas de Bogotá seguro ha logrado que el índice de ingreso de la Luis Ángel disminuya y eso significa un mejoramiento en los servicios bibliotecarios de la Capital.
Lamentablemente la Red ya se enfrenta a problemas financieros y la Alcaldía ha cedido su administración con un convenio a otas insituciones. Pero el logro de su creación se encuentra vivo y debe ahora la comunidad luchar por su permanencia.
